Vacunas infantiles

Como lo prometido es deuda, hoy os hablaré de la importancia de la vacunación en niños y lactantes y, también de los calendarios de vacunación.

En primer lugar, me gustaría que so dierais cuenta de lo imprescindible que es la vacunación de los bebés, ya que, así se puede evitar el riesgo de que el niño padezca una enfermedad de la que ha sido vacunado, es decir, no va a sufrir la enfermedad, por lo tanto no va a tener la capacidad de contagiar dicha patología a las personas de su entorno, lo que explica que las vacunas son importantes a la hora de conseguir la erradicación de enfermedad.

Se puede decir que la primera vacuna natural que se le administra al recién nacido es el calostro, esto es, la primera leche que sale del pecho materno tras dar a luz, este es de vital importancia porque al ser ingerido cubre las paredes de  la vía digestiva y su proceso de absorción estimula elementos defensivos del niño. La primera vacuna que se le administra (digamos de forma artificial) es la correspondiente a la tuberculosis y la primera dosis de la hepatitis B.

No es normal que tras la administración de la vacuna se produzcan reacciones adversas, aunque si se pueden producir molestias en el lugar de aplicación, fundamentalmente en la zona del deltoides (hombro) y la cara anterior del muslo y pueden estar acompañadas por casos de fiebre e irritabilidad. Son pocos los niños que experimentan reacciones más fuertes como convulsiones relacionadas con la fiebre.

Calendario de vacunación nacional del 2013

En segundo lugar, es necesario decir que las vacunas que una persona va a recibir a lo largo de su vida están pautadas en documentos denominados calendarios de vacunación; en España tenemos un calendario de vacunaciones en el que aparecen unos medicamentos que deben ser inyectados en todos los niños, pero a mayores hay 17, uno por cada comunidad, ya que el ministerio de sanidad concede a los gobiernos de las autonomías la potestad para que completen estos calendarios que, además son modificados cada año.

Esta potestad no convence a una gran parte de médicos y a la sociedad en sí, ya que provoca la aparición de diferencias entre las vacunas que puede recibir un niño de Galicia con otro de Andalucía, por ejemplo; esta diferencia pasan a ser entre individuos de la misma comunidad, lo que se debe a las modificaciones que se llevan a cabo de los calendarios de vacunación.

Y hasta aquí la entrada de hoy. Aquí os dejo el enlace a la anterior entrada sobre la importancia de la vacunación.