De Pinocho a Enric Marco. Mitomanía

Buenos días amig@s. Hoy estamos aquí para hablar de uno de los trastornos más desconocidos. Éste afecta a nuestro día a día y puede ser mucho más peligroso de lo que pensamos. Hoy hablaremos de la mitomanía.

Pero... ¿qué conocemos por mitomanía?

La mitomanía (también conocida como pseudología fantástica) es la necesidad patológica e irrefrenable de

 mentir constantemente a lo largo del día a día, deformando la realidad a propósito con el fin de obtener un beneficio.


Hay una serie de características que todo mitómano posee, una serie de coincidencias entre todos los que sufren esta patología. Son 7:

• Capacidad de manipulación y de poder de convicción
• No hay motivación para la mentira
• En el discurso de la persona mitómana se entremezclan trazos de realidad y de completa y pura fantasía, pero siempre resulta verosímil
• Capacidad de saber actuar e histriónica
• No aceptación del problema y cambio de tema cuando éste sale a relucir
• Altos niveles de ansiedad
• Escasas habilidades sociales del afectado

Además de lo anterior existen otras consideraciones sobre la mitomanía que creemos que debéis saber.

Por ejemplo: el que los familiares y allegados cuando descubran el problema hagan como que no existe es absolutamente negativo, ya que lo único que están haciendo es hacer real su mundo de fantasía y engrandecer su mentira. Si los familiares actúan de forma activa y rechazan al mitómano (que es lo habitual) lo que ocurre es que el mitómano ve que su mentira es desmontada y vuelve a la realidad.

Otra: el punto de origen de esta patología suele ser una muy baja autoestima del paciente, que se inventa grandes hazañas y grandes dramas para hacer su vida más interesante ocultando sus verdaderas carencias.

Una última trata sobre la importancia de aquel que hace lo mismo de un mitómano pero porque su carera profesional depende de ello (vive de esa mentira) o saca un beneficio económico o de otro tipo de crear ese mundo de fantasía.

Enric Marco

El caso más famoso de mitomanía es el de Enric Marco. Este barcelonés de origen se inventó que estuvo en el campo de concentración nazi de Flossenbürg, manteniendo esta mentira de 1978 a 2005. Incluso llegó a presidir asociaciones de víctimas, recibir la cruz de Sant Jordi y dar numerosas conferencias.

Esta patología puede ser confundida fácilmente con el tipo de persona conocido como "mentiroso compulsivo" mas no es así. Existen una serie de diferencias entre ambas cuestiones:

1. Para esa persona mentir no es la necesidad de defenderse o contraatacar, sino el deseo de sentirse bien a través de mentir sin otra motivación añadida.
2. Para el mitómano la mentira no es un medio, es un fin.
3. Un mentiroso compulsivo puede llegar creerse hasta cierto punto su mentira. Un mitómano vive en ella, completamente fuera de la realidad.

Una pregunta que podéis plantearos es...¿A partir de qué punto se considera a una persona un mitómano? La respuesta es que si el 30% o más de lo que cuenta sobre su vida una persona es mentira ésta es mitómana.

Tratamiento

El psicolódico es complicado, mas si se acude al especialista a tiempo se puede llegar a tratar. Se pueden aplicar terapias cognitivas, técnicas de comunicación e incluso psicofármacos (esto último todavía sin demostrar).

Consejos para prevenir la mitomanía

• Reforzar la autoestima
• Fortalecer la confianza en tí mismo
• Crearte una firme personalidad a prueba de golpes
• Si conoces a alguien con mitománia trata de hacer con disimulo que vaya al médico
• Difunde la palabra. Casi todos podemos, en potencia, ser mitómanos

El punto final de todo mitómano que no toma el tratamiento psicológico adecuado suele ser el rechazo social y el completo descrédito del individuo ante los demás.

_________________________________________________________________________________

+info

Hasta aquí la entrada de hoy. Recordad visitar nuestro joven twitter creado ayer (@sabescuidarte). Dicho esto, solo queda ya decir...

Saludos y... ¡Pasad un día saludable!